
Llevo varios días asustado después de la noticia que leí en el Heraldo: "El Aeropuerto de Zaragoza aspira a ser el tercero del país en cuanto a volumen de carga en 2010" y aunque como zaragozano debería estar contento por el avance que puede suponer para la economía de la ciudad este hecho, no puedo, porque en poco tiempo seré uno de los tantos vecinos que viven en Valdespartera.
Es cierto que la Expo es una de las razones por las que se está potenciando el aeropuerto, pero en mi opinión hay otra mucho más importante, el gobierno se ha dado cuenta de lo que supone el que muchos ciudadanos vayan a ir a vivir en los próximo años al nuevo barrio de Valdespartera, esto les ha hecho el tener que meter prisa en hacer ampliaciones del aeropuerto, puesto que ahora mismo el barrio está sin gente y no pueden darse cuenta exacta de cual es la situación de sus casas. El barrio esta bajo el corredor que toman todos los aviones que tienen que aterrizar en nuestro aeropuerto. Se puede ver en un link del blog alas de plomo, en el que además dice algo que es cierto y que le doy toda la razón, comenta que los vecinos de Montecanal, unidos en la asociación los sauces llevan mucho tiempo luchando contra esto y no han obtenido el apoyo del resto de ciudadanos, a parte de que cada cual va a lo suyo, porque se les ha acusado de ser unos "señoritos ricos" y que ellos mismos se lo han buscado. Es triste pero ahora vamos a ser los vecinos de Valdespartera los que tengamos que movilizar a los ciudadanos. Y no se debería perder el tiempo, ya se ha comentado en muchas ocasiones en el grupo virtual de vecinos del nuevo barrio el problema que vamos a tener con los aviones y la rapidez con la que el gobierno está impulsando el desarrollo del aeropuerto, por supuesto cuantos menos vecinos tanga Valdespartera cuando este hecho menos quejas habrá recibido. Luego es más difícil echar marcha atrás.
- Hasta que haya suficientes vecinos instalados en el barrio, que entonces posiblemente sea tarde.
- Hasta que se de el nuevo resultado de las elecciones y se cambie de gobierno, algo que no asegura que la cosa vaya a mejor, pero que da algo más de confianza puesto que fueron los que proyectaron en un principio la eco-ciudad.